Finanzas sostenibles: qué son y cómo implementarlas en la empresa

Las finanzas sostenibles consisten en la inversión y financiación de proyectos que tienen en cuenta los impactos ambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés). Es decir, las finanzas sostenibles tienen como objetivo equilibrar la rentabilidad financiera con la sostenibilidad a largo plazo, incluyendo la responsabilidad social y ambiental. Así, esta gestión financiera forma parte del área que se centra en las decisiones monetarias de una empresa, es decir, están dentro de las finanzas corporativas o corporate finance.

El objetivo principal de las finanzas sostenibles es asegurar que las inversiones y financiamientos promuevan un crecimiento económico responsable, respetando al mismo tiempo los derechos humanos, asegurando la protección del medio ambiente y fomentando la inclusión social.

Las finanzas sostenibles pueden abarcar una amplia gama de instrumentos financieros, incluyendo bonos verdes, préstamos verdes, fondos de inversión socialmente responsables (SRI, por sus siglas en inglés) y otros productos financieros. Estos instrumentos financieros pueden ser utilizados para financiar proyectos que aborden desafíos sociales y ambientales, como energías renovables, eficiencia energética, transporte sostenible o tratamiento de residuos, entre otros.

Por qué son importantes las finanzas sostenibles para el futuro de las empresas

Las finanzas sostenibles son importantes para el futuro de las empresas por varias razones:

1. Protección contra riesgos ambientales y sociales. Las empresas que no adoptan prácticas sostenibles pueden enfrentar riesgos significativos en términos de daños ambientales, impactos sociales negativos y problemas de gobernanza. Estos riesgos pueden ocasionar en la empresa sanciones regulatorias, demandas, pérdida de reputación y costes financieros significativos. Al adoptar prácticas sostenibles, las empresas pueden reducir e incluso eliminar estos riesgos y proteger su reputación y su valor financiero.

2. Demanda del mercado. Los consumidores están cada vez más interesados en comprar productos y servicios de empresas que se preocupan por el medio ambiente y la sociedad. Las empresas que adoptan prácticas sostenibles pueden satisfacer esta demanda del mercado y aumentar su base de clientes.

3. Acceso a nuevas oportunidades de negocio. Las empresas que adoptan prácticas sostenibles pueden acceder a nuevas oportunidades de negocio en áreas como la energía renovable, la eficiencia energética y la gestión de residuos. Estas oportunidades pueden generar ingresos adicionales y mejorar la rentabilidad a largo plazo de la empresa.

4. Cumplimiento regulatorio. Cada vez hay más regulaciones y leyes relacionadas con la sostenibilidad ambiental y social. Las empresas que no cumplen con estas regulaciones pueden enfrentar sanciones financieras y legales. Al adoptar prácticas sostenibles, las empresas pueden asegurarse de cumplir con estas regulaciones y evitar sanciones financieras y legales.

5. Mejora de la eficiencia operativa. Las empresas que adoptan prácticas sostenibles pueden mejorar la eficiencia operativa y reducir costes. Por ejemplo, la implementación de prácticas de eficiencia energética puede reducir los costes de energía y la implementación de prácticas de gestión de residuos puede abaratar el coste de eliminación de residuos.

Cómo integrar las finanzas sostenibles en las finanzas corporativas de una empresa

La integración de las finanzas sostenibles en las finanzas corporativas de una empresa no es tarea fácil, pero existen diferentes estrategias para conseguirlo. En general, la integración de las finanzas sostenibles se realiza en tres etapas: la evaluación, la implementación y la medición.

La primera etapa es la evaluación, en la que la empresa evalúa su exposición a los riesgos y oportunidades ESG. Esto implica una evaluación detallada de las operaciones y prácticas de la empresa en relación con los criterios ESG. Esta debe incluir la identificación de los riesgos y oportunidades relacionadas con la sostenibilidad y el impacto que pueden tener en la empresa.

Una vez que se ha realizado la evaluación, se procede a la segunda etapa, que es la implementación. La implementación implica la integración de los criterios ESG en las decisiones de inversión y financiación de la empresa. En este sentido, la empresa debe identificar las prácticas sostenibles que puede adoptar y las oportunidades de inversión y financiación sostenibles disponibles. Es importante que la empresa establezca objetivos y metas claras para la sostenibilidad y que se involucre a los empleados y stakeholders en la implementación de prácticas sostenibles.

Finalmente, la tercera etapa es la medición, en la que se miden los resultados y se evalúa el impacto de las prácticas sostenibles en la empresa. Es importante que la empresa establezca indicadores de desempeño ESG y realice una evaluación regular del progreso hacia sus objetivos de sostenibilidad. La medición también es importante para demostrar el impacto de las prácticas sostenibles en la rentabilidad y la reputación de la empresa.

Una de las formas más comunes de integrar las finanzas sostenibles en las finanzas corporativas de una empresa es a través de la adopción de prácticas de compraventa de empresas sostenibles y de fusiones y adquisiciones sostenibles. Las empresas pueden realizar un análisis ESG de los posibles objetivos de adquisición y utilizar estos criterios para tomar decisiones de inversión y financiación.

Otra forma de integrar las finanzas sostenibles en las finanzas corporativas es a través del private equity. Los inversores de private equity pueden utilizar los criterios ESG en sus decisiones de inversión y financiación y trabajar con las empresas para implementar prácticas sostenibles.

Por último, las empresas también pueden trabajar con asesorías financieras especializadas en finanzas sostenibles para desarrollar estrategias de inversión y financiación en esta línea. Estas asesorías pueden ayudar a dichas organizaciones a identificar oportunidades, a establecer objetivos y metas de sostenibilidad y a medir el impacto de las prácticas sostenibles en la compañía.

En Anquor somos una asesoría financiera con más de 30 años de experiencia en el sector de corporate finance. Nuestra actividad consiste en asesorar a compradores o vendedores en operaciones y gestiones de compraventa, fusiones y adquisiciones de empresas. Además, prestamos nuestros servicios como consultora estratégica y financiera, así como también como asesoría para private equity. La calidad de los profesionales que forman parte de nuestro equipo nos avala. Somos grandes partidarios de la aplicación de las finanzas sostenibles, pues nos preocupamos por los derechos humanos, el medio ambiente y la inclusión social. Para cualquier sugerencia contacta con nosotros. Estaremos encantados de atenderte.